Cuando Omahiry producía carbón, el proceso incluía pasar dos semanas en el bosque de Marotia talando árboles. Luego pasaba una semana adicional cocinando la madera que había recolectado. Este proceso obligaba a Omahiry a respirar el humo negro y áspero, lo que causaba que muchas veces se enfermara. Sin embargo, seguía trabajando porque si no lo hacía, no podría alimentar a sus hijos. Después de un arduo mes de trabajo, terminaba con unas 40 sacas de carbón para vender, a solo un dólar cada una. Esto le dejaba justo el dinero suficiente para alimentar a sus hijos.
En 2020, la vida de Omahiry cambió cuando se le presentó una oportunidad de trabajo a través de Eden Reforestation Projects, en nuestro equipo de Madagascar. Ahora, Omahiry inicia sus días de plantación saliendo de su casa a las 6:30 am y se encuentra con sus compañeros en un punto de reunión. Parten a pie para una caminata de dos horas a través del lodo.
Cuando no está plantando propágulos, Omahiry patrulla los sitios de plantación por seis horas seguidas, protegiéndolos de los taladores o supervisando a los pescadores de cangrejo para asegurarse de que tengan cuidado y no pisen las plántulas.
Una comunidad que antes se consideraba al borde de desaparecer, ahora ha renacido. Desde que Omahiry y nuestro equipo comenzaron a trabajar en 2020, la población ha aumentado en una cuarta parte, y personas de comunidades cercanas han iniciado sus propias microempresas vendiendo productos locales. Esto nunca había ocurrido antes. Para Omahiry, ahora tiene la oportunidad de costear alimentos, vivienda, ropa y otros gastos, gracias a un salario justo. No solo pasa horas protegiendo el medio ambiente, sino que también puede ser pescador en su tiempo libre.
¿Curioso por saber más sobre las personas que convierten en realidad nuestra asociación con Eden Reforestation Projects, día a día? ¡Descubre la historia de Abdi aquí!
Gracias a nuestra comunidad de bunq Elite, hemos podido plantar más de 9 millones de árboles en Kenia y Madagascar, y seguimos con nuestros esfuerzos hacia la reforestación. Además, el proyecto no solo se trata de la conservación de la naturaleza, sino también de salarios justos y mejores condiciones laborales para las comunidades en esas áreas.
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