Ser estudiante es una etapa emocionante, pero muchas veces viene acompañada del desafío de gestionar las finanzas con un presupuesto ajustado. Entre las comisiones de matrícula, el alquiler y los gastos diarios (la lista sigue…), puede parecer que tu dinero desaparece tan rápido como llega. Pero no te preocupes: hay muchas formas fáciles de estirar tu presupuesto sin sacrificar la diversión y la libertad de la vida estudiantil. Aquí tienes cómo hacer que tu dinero rinda más con bunq a tu lado.
1. Crea y sigue un presupuesto
Un presupuesto bien planificado es la clave del éxito financiero. Empieza por listar tus gastos esenciales—alquiler, servicios, comida y transporte—y asigna una porción para actividades de ocio. La clave para seguir tu presupuesto es realizar un seguimiento regular de tus gastos. Con el Easy Budgeting de bunq, puedes configurar cuentas bancarias dedicadas para diferentes gastos y asignar automáticamente tus fondos. Así siempre sabrás exactamente a dónde va tu dinero, ayudándote a mantenerte al día con el mínimo esfuerzo.
2. Aprovecha los descuentos para estudiantes
Una de las ventajas de ser estudiante es el acceso a una variedad de descuentos. Páginas como Student Beans, StudentenKorting, UNiDAYS y la Tarjeta Internacional de Identidad de Estudiante (ISIC) ofrecen muchas ofertas en todo, desde suscripciones hasta ropa. Lleva siempre contigo tu carnet de estudiante y no dudes en preguntar si hay descuento disponible—¡te sorprenderá cuánto puedes ahorrar solo por ser estudiante!
3. Elige libros usados o digitales
Los libros de texto pueden ser uno de los mayores gastos durante tus estudios, pero hay formas de reducir este costo. Busca libros usados de compañeros que ya hayan completado el curso o elige versiones digitales, que a menudo son más baratas y fáciles de llevar. Páginas como Chegg ofrecen grandes ofertas en libros usados y digitales. Además, vender tus libros viejos al final del semestre puede darte algo de dinero extra para el próximo período.
4. Cocina en casa y lleva tu comida
Comer fuera puede ser tentador, pero puede agotar tu presupuesto rápidamente. Cocinar en casa y llevar tu propia comida a la universidad no solo es más barato, sino que también es más saludable. Planea tus comidas para la semana para simplificar tu compra de alimentos y evitar compras impulsivas. Preparar comidas con anticipación puede ahorrarte tiempo y dinero, haciendo tu rutina diaria más manejable. Además, aplicaciones como TooGoodToGo ofrecen alimentos y comestibles con descuento que de otro modo se desperdiciarían, una victoria tanto para tu bolsillo como para tu estómago.
5. Usa transporte público, bici o camina
Si vives en un área con transporte público confiable, aprovéchalo al máximo para ahorrar en gasolina y gastos de estacionamiento. Si viajas frecuentemente, considera invertir en suscripciones de viaje o tarjetas de transporte para estudiantes. Para quienes viven en ciudades amigables con las bicicletas como Ámsterdam, pedalear no solo es una opción económica, sino también beneficiosa para tu salud.
Caminar siempre que sea posible es otra excelente manera de ahorrar dinero y mantenerte activo.
6. Comparte gastos de vivienda con compañeros
La vivienda suele ser el gasto más significativo para los estudiantes, especialmente en ciudades grandes. Si vivir solo está sobrepasando tu presupuesto, considera compartir un apartamento con compañeros. Dividir el alquiler y los servicios puede marcar una gran diferencia, reduciendo tus costos significativamente. Además, vivir con otros puede ser una excelente forma de hacer nuevos amigos y crear una comunidad de apoyo durante tus años de estudiante.
7. Vende artículos que no uses
¿Tienes cosas que ya no necesitas? Conviértelas en efectivo vendiéndolas en línea. Plataformas como Marketplace de Facebook y Vinted facilitan llegar a posibles compradores. Dedica una tarde a ordenar tu espacio, ¡y te sorprenderá cuánto dinero puedes ganar con cosas que simplemente están guardadas! Además de despejar tu espacio, tendrás algo de dinero extra para ahorrar.
8. Las mejores cosas de la vida son gratis
Muchas universidades ofrecen una variedad de recursos gratuitos para estudiantes, desde membresías a gimnasios y servicios de asesoramiento hasta licencias de software y talleres académicos. Antes de gastar dinero en algo, revisa si tu escuela lo ofrece gratis. ¡Te sorprenderá la variedad de servicios y beneficios incluidos en tu matrícula!
Conclusión
Gestionar tus finanzas como estudiante no tiene por qué ser estresante. Incorporando estos consejos de ahorro en tu rutina diaria, puedes hacer que tu presupuesto rinda más sin dejar de disfrutar de tu vida de estudiante. Con bunq a tu lado, rastrear tus gastos y seguir tu presupuesto nunca ha sido tan fácil. Empieza a ahorrar hoy y saca el máximo provecho a tus años de estudiante.




